Mosaico Urbano México
- CDMX, México
Panorama de la Organización
Mosaico Urbano México, originalmente fundado en 2006 bajo otro nombre, opera en el lado este de la Ciudad de México, particularmente en los municipios de Chimalhuacán y Los Reyes La Paz. La misión de la organización es transformar las áreas urbanas frágiles en ciudades de SHALOM mediante el desarrollo de líderes y estructuras sociales que generen un cambio duradero y multifacético. Su enfoque está basado en la teología de la Missio Dei (la misión de Dios) y se centra en abordar las causas fundamentales de la pobreza urbana y la violencia. Mosaico Urbano México emplea varias estrategias principales: plantar y equipar comunidades de fe, promover a los jóvenes y niños como agentes de cambio a través de clubes de niños, arte y deportes, fortalecer la sociedad civil para que participe en la renovación comunitaria, desarrollar liderazgo urbano y ofrecer oportunidades vocacionales a los jóvenes adultos. A través de estas iniciativas, Mosaico Urbano México tiene como objetivo crear comunidades seguras, resilientes e inclusivas. Al aprovechar los recursos locales y fomentar la colaboración con diversos actores, la organización busca generar un impacto sostenible y promover una transformación integral en las comunidades frágiles del lado este de la Ciudad de México.
Población Beneficiaria
- Personas de zonas urbanas en situación de pobreza.
- Niñas, Niños y Adolescentes
- Mujeres
- Familias
- Líderes
- Emprendedores
Áreas de Enfoque
- Transformación Espiritual y Comunidades de Fe
- Desarrollo y Capacitación de Liderazgo
- Desarrollo Comunitario
- Desarrollo Centrado en las Personas y las Familias.
- Generación de Riqueza y Desarrollo Económico.
Trayectoria de la Organización
Mosaico Urbano México comenzó su camino en 2006 en una comunidad urbana empobrecida, en Chimalhuacán, en las afueras de la Ciudad de México. Inicialmente establecido como un sitio piloto, su objetivo era desarrollar un modelo de cambio integral para abordar los problemas profundamente arraigados de pobreza, desesperanza, violencia, fragmentación e injusticia. A finales de 2012, este modelo de cambio se replicó con éxito en Los Reyes La Paz, un municipio vecino. Fue allí donde el modelo de cambio de Mosaico Urbano tomó forma completamente, abordando las necesidades diarias, aprovechando los recursos locales e impactando positivamente a jóvenes, niños y familias. Se movilizaron comunidades de fe y surgieron líderes locales, quienes asumieron la responsabilidad de la transformación de sus comunidades. A través de estos esfuerzos, más de 15,000 personas accedieron a servicios esenciales como agua potable y sistemas de drenaje, cambiando dinámicas de poder y logrando transformaciones que antes se consideraban imposibles.
El enfoque principal de Mosaico Urbano ha sido empoderar a los líderes locales como agentes de cambio dentro de sus vecindarios, enfocándose en diversas áreas como trabajo con jóvenes y niños, plantación de iglesias, desarrollo familiar y comunitario, mejora de infraestructura, recuperación emocional, salud pública, prevención de la violencia, formación de liderazgo, educación teológica, construcción de paz y abogacía. En respuesta a los devastadores terremotos de septiembre de 2017, la organización adaptó su modelo de cambio a un contexto de ayuda humanitaria, brindando primeros auxilios emocionales a más de 2,000 residentes, asistiendo en la demolición de 207 viviendas inhabitable, asegurando la reconstrucción de 200 casas y ayudando a un municipio a operacionalizar mecanismos de protección civil. En 2018, el trabajo de abogacía de la organización cobró impulso, introduciendo una legislación para una ley nacional que promueve la participación ciudadana y medidas anticorrupción, avanzando en el "derecho a la ciudad" para todos y contribuyendo al Objetivo de Desarrollo Sostenible de la ONU #11: "Hacer que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles". Durante sus primeros 16 años de operación, Mosaico Urbano México impactó a más de 50,000 personas en varios municipios del este de la Ciudad de México y el estado de Morelos, asociándose con organizaciones como Habitat for Humanity, el Instituto Tecnológico de Monterrey, World Vision y México Unido Contra la Delincuencia.
En los últimos tres años, Mosaico Urbano México enfrentó una crisis organizacional significativa que casi llevó a su colapso. Sin embargo, la dedicación inquebrantable de líderes locales clave y voluntarios, quienes se mantuvieron firmes con la visión y trabajaron incansablemente hacia su cumplimiento, aseguró la supervivencia de la organización. Hoy en día, Mosaico Urbano México está en una fase de reconstrucción, refinando sus intervenciones en tres comunidades urbanas marginadas y construyendo sobre la base establecida en los años anteriores.
Reseña del Líder Clave
Nacida y criada en la Ciudad de México, Veronica equilibró sus roles como madre de dos hijas, esposa y empresaria desde 1990 hasta 2009. Durante muchos años, gestionó un taller especializado en inspección de vehículos y convertidores catalíticos, impulsada por su compromiso con el cuidado ambiental y su deseo de contribuir a una sociedad responsable que promueva valores para las generaciones futuras. En 2012, Veronica trabajó como Entrenadora Asistente Electoral para el Instituto Nacional Electoral (INE) en el Distrito 39 del Estado de México, participando en el único conteo nacional, una experiencia que profundizó su comprensión sobre la transparencia electoral. En 2013, hizo la transición al sector no lucrativo, uniéndose a Transformación Urbana Internacional en el área de relaciones estratégicas y colaborando estrechamente con Mosaico Urbano. Su misión era ayudar a transformar comunidades urbanas frágiles en vecindarios fuertes y resilientes. Además de brindar apoyo administrativo y logístico, Veronica fue Observadora Electoral en cuatro procesos electorales, gestionó proyectos de distribución de sillas de ruedas y supervisó iniciativas de mejora de viviendas, incluyendo el suministro de tinacos y calentadores solares para comunidades vulnerables en asociación con la Fundación Mariana Trinitaria. Desde enero de 2022, Veronica ha liderado Mosaico Urbano en su estructura renovada, continuando su trabajo en comunidades vulnerables con el objetivo de transformarlas en comunidades de Shalom. Su labor se centra en el compromiso cívico, la cohesión social y la transformación espiritual a través del mensaje del amor de Dios. Actualmente, ella y su equipo están trabajando activamente en tres áreas socialmente marginadas en las zonas altas del municipio de Los Reyes La Paz, en el Estado de México. En el proceso electoral más reciente, Veronica también se desempeñó como Consejera Electoral Suplente. Desde hace nueve años, Veronica ha sido miembro de la iglesia cristiana Ministerio Internacional Generación que Conquista en Ixtapaluca. En enero de 2023, fue nombrada líder de grupo celular, un rol que continúa disfrutando profundamente. También está participando en el programa de capacitación de liderazgo en educación bíblica de la iglesia, habiendo completado recientemente el tercer nivel. Veronica siente pasión por fomentar el respeto y el amor entre las personas. Cree que la ciudadanía activa, la colaboración y el compartir el mensaje del amor de Dios son esenciales para construir una sociedad mejor.
Trayectoria de Financiamiento con Camino Alliance
En 2020, Camino Alliance obtuvo una subvención de $37,000 para Mosaico Urbano Colombia con el fin de apoyar la construcción y el desarrollo de un centro de retiros y formación en la región de Monte de Marías, que a largo plazo también podría funcionar como un promotor del ecoturismo. Este centro tiene como objetivo fortalecer a las iglesias, ministerios y organizaciones locales que trabajan en contextos de pobreza urbana en Barranquilla. El impacto de esta subvención ha permitido a la organización avanzar en su misión y alcanzar los siguientes hitos: se completó el diseño arquitectónico del centro, se construyó el 90% de la instalación, incluyendo cinco habitaciones, seis baños, una sala de estar con una terraza de observación y una cocina. Además, se diseñaron e instalaron 600 metros de líneas eléctricas con postes de alta tensión desde la carretera principal hasta la propiedad; se construyeron 500 metros de cercas de alambre de púas y se adaptaron 300 metros de caminos de acceso al lugar. Asimismo, se plantaron ½ ha de plátanos y otra ½ ha de aguacates, se realizaron entrenamientos Missio Dei para jóvenes y líderes de iglesias, y se involucraron a los pastores en sesiones de planificación estratégica y retiros espirituales. Estos logros reflejan el impacto transformador de la subvención, facilitando el desarrollo de infraestructura, mejorando las capacidades de liderazgo y sentando las bases para la generación de ingresos sostenibles para la organización.